El afijo VALDEJERA está integrado en
la A.E.P.M.E,
(Asociación Española del Perro Mastín Español), y acepta plenamente los
compromisos y requisitos exigidos en su Plan de Cría. Por ello nuestras
camadas son controladas y tatuadas por esta asociación y nuestros
reproductores son radiografiados de displasia de cadera. Todo ello como
parte de la seriedad y compromiso con la mejora de esta raza y con los
propietarios de ejemplares de este afijo. Nuestros esfuerzos se dirigen
exclusivamente al mastín español dadas las peculiaridades y dificultades
que su crianza responsable conlleva. Actualmente estamos consiguiendo
notables resultados con nuestros sementales, en los que se conjugan las
genealogías más representativas de los últimos años en el panorama
mastinero. En nuestras camadas ponemos un
mimo exquisito en su tratamiento y manejo, tratando de aplicar en cada
uno de los pequeños, desde su nacimiento, criterios de socialización e
integración en la
manada
y con nuestra familia, con el fin de
garantizarle un carácter equilibrado en el futuro. Tratamos, en
definitiva, de acercarnos al perro descrito en el
STANDARD
racial de la F.C.I.,
empleando criterios rigurosos de selección, con el deseo de aunar en
nuestros mastines españoles tipicidad, carácter y estructuras.
Como ejemplares más destacados y conocidos criados por nosotros
recordaremos a
Ch. Chon de
Valdejera, campeón del Mundo 95,
de Europa 95, Internacional y de España 97. Digno de mención es también
recordar que fue RCAC en las Monográficas AEPME 96 y 97 y Trofeo al
mejor Movimiento 96.
Así mismo importantes, sin duda, fueron
Ch
Iris de Valdejera
y
Ch
Aro de Valdejera, ambos Campeones
de España, Internacionales y sobre todo ambos Campeones de
la AEPME
1999.
Durante este Campeonato fueron elegidos también Mejor Pareja absoluta.
Recordemos también el Trofeo a la Tipicidad de Iris en
la Monográfica AEPME
99.
Sin embargo el trofeo más importante es el recuerdo imborrable que han
dejado en quienes
hemos tenido la suerte de vivir con ellos, que nos estimula a seguir
buscando, con sus dignos descendientes, al mastín ideal.
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